LOS FILTROS (Guarda tu mente parte 2)



Gracias por darte este tiempo de lectura para ti, esta es la segunda parte de la serie, si no haz leído la primera, hazlo ahora
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Volviendo al pasaje dice: “guarda tu corazón” ¡WOW! De manera que es bíblico, entonces sin duda, necesito cuidar mi corazón, por lo cual a partir de este momento bajaré considerablemente el consumo de grasas en mi alimentación y haré ejercicio cardiovascular, por lo menos 20 minutos todos los días.

Ahora para demostrarles que no es solo intención, iniciaré en este momento, pero me cuesta hacerlo solo así que por favor ayúdame: ponte de pie, ahora haremos 10 jumping jacks, (como hacer jumping jacks) ¿list@? ¡Ahora! después de hacerlos dime ¿Qué te dice su corazón?

Cuando la biblia utiliza la palabra “corazón” no se refiere a esa bomba ubicada en la parte izquierda de mi pecho, sino más bien, a mi mente.

"La misericordia y la verdad nunca se aparten de ti; átalas a tu cuello, escríbelas en la tabla de tu corazón… Confía en el Señor con todo tu corazón, y no te apoyes en tu propio entendimiento." Proverbios 3:3, 5

Vamos a hacer un ejercicio de sustitución de palabras: en lugar de leer en el texto la palabra “corazón”, vamos a leer la palabra “mente”, regresemos al pasaje y hagámoslo.

Yo tengo una sola mente, sin embargo, se divide en dos partes principalmente: 

Consciente o Entendimiento: que abarca del 5% al 10% de lo que soy como persona. 

Subconsciente o Tabla de mi corazón: que abarca el 90% al 95% de lo que soy como persona.

La mejor forma de ejemplificarlo es con un Iceberg:

 


La parte consciente percibe el entorno y los eventos que suceden a través del sistema: “VAKOG” que no es otra cosa que los 5 sentidos: Visual, Auditivo, Kinestésico (Tacto), Olfativo y Gustativo.

La parte subconsciente es la que interpreta dichos eventos y la que dicta los resultados de mi vida. El 95% de mi vida la he vivido subconscientemente, y este se rige básicamente por dos reglas:

1. La mente no para. Todo el tiempo esta masticando la información recibida, (A esto se le conoce como los chicles mentales).

2. Solo existe el “yo”. Para la mente subconsciente no existe nadie más que yo.

A través del sistema VAKOG recibo la información del exterior, de aquí la proceso a través de diversos “FILTROS” que son: mis creencias. Y entonces es que defino la percepción de mi  vida.


Para poder experimentar un cambio en mi vida, se vuelve indispensable “cambiar los filtros” es decir, reprogramar mi mente a través de la lingüística. Si cambio los filtros, cambio mi percepción de la vida.

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